En Madrid hay mucha terraza en la última planta del edificio con exquisitas vistas de la ciudad, pero incluso estando a ras de suelo se puede tener una buena panorámica y, por supuesto, comer bien.
Pero la elección de estos restaurantes no se basa solo en como se ve Madrid desde ellos —en algún caso era imposible no mencionarlo— también se han sumado aquellos en los que te descansa la vista, ya sea por lo bonita que es la decoración, por la cantidad de plantas o por lo especial de paisaje.
1. Café Oriente
Bajo las bóvedas que un día pertenecieron al Convento de San Gil del siglo XVII se emplaza el Café de Oriente. Está situado en el lado opuesto de la plaza al Palacio Real, así la vista desde una de sus mesas es como una postal de Madrid. Desde la mesa número 9 el dibujante Antonio Mingote encontraba la inspiración para mandar una nueva viñeta al periódico ABC cada día.
Roberto Hierro lleva siendo el chef del restaurante —y del grupo Lezama— desde que empezaron, a finales de los 80. La carta es clásica, pero manteniendo estándares de alta cocina con recetas como el bacalao de Faroe confitado a baja temperatura con el guiso de sus callos y sus cocochas al pil-pil.
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📍Plaza de Oriente, 2 (Centro)
2. El ventorrillo
Continuando en el Madrid de los Austrias otra muy privilegiada terraza es la de El ventorrillo. Desde la plaza de Oriente solo habría que cruzar el viaducto de Segovia hasta una pequeña explanada con árboles donde se ubica esta terraza.
Si los atardeceres desde el templo de Debod son famosos por su perspectiva de la ciudad, este punto ofrece la vista de La Almudena desde otro ángulo. Además, el nombre del restaurante ya da algunas pistas de que incluso en pleno agosto aquí siempre corre una ligera brisa.
Su carta es principalmente de raciones y da juego a la improvisación, pero si hay que elegir, su pollo o conejo al ajillo es exquisito.
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📍Calle de Bailén, 14 (Centro)
3. Azotea Cibeles
Incluso queriendo evitar los rooftops madrileños es probable que acabes en alguno de ellos, y si hay que elegir mejor empezar por el principio: Azotea Cibeles, el restaurante del Palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento de Madrid.
Este restaurante ha reabierto sus puertas con nuevos dueños y un concepto algo cambiado. Por un lado, está el restaurante de alta cocina, con coctelería y, por otro, el café en el que el menú del día con vistas a Cibeles solo cuesta 14, 35 €.
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📍 Plaza Cibeles, 1, Sexta Planta (Centro)
4. El Jardín del Ritz
Justo al lado del Museo del Prado hay una de las terrazas más verdes de la ciudad: El Jardín del Ritz, que por supuesto pertenece al mítico hotel. La decoración y el ambiente que se intenta trasmitir es de sofisticación, y eso también se traduce en su carta. Quique Dacosta, uno de los mejores chefs españoles, dirige su cocina en la que se revisionan algunos clásicos de la gastronomía de aquí, como su versión de la tortilla con setas, panceta ibérica curada y chips de ajo.
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📍 Plaza Cánovas del Castillo, s/n (Centro)
5. La cúpula de los Peñotes
La Cúpula de los Peñotes se ubica en un centro de jardinería de la Moraleja que rodea la cúpula geodésica que dan nombre al lugar. Sí, aquí no podemos mirar al horizonte, pero la sensación de estar dentro de un invernadero gigante alegra la vista igual.
En sus platos las grandes protagonistas son las verduras, un buen ejemplo es la coliflor a la plancha con parmesano y hummus de remolacha. Además, tienen una carta larga para desayunos y meriendas.
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📍Plaza de La Botánica, 1 (Alcobendas)
6. Villa Verbena
A veces hay que salir de las clásicas vistas de la ciudad para coger perspectiva y la ubicación de Villa Verbena es perfecta para ello. Este restaurante es la apuesta del grupo Triciclo con The Hat Madrid en el lago de la Casa de Campo. Cuenta 600 m² de terraza y desde cualquiera de sus mesas se ve el agua, los árboles y el perfil de algunos edificios emblemáticos de Madrid que parecen estar más lejos de lo que en realidad están.
Este restaurante se suma a la renovación que se realizaron en los alrededores del lago en 2019, tanto por las instalaciones públicas, como por los negocios de la zona. Es muy buena parada después de un largo paseo por el mayor pulmón verde de la ciudad.
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📍Casa de Campo