La oferta hotelera de Madrid busca siempre reinventarse. Hoteles burbuja, habitaciones en cabañas, cuevas, casas del árbol… Y ahora también un hotel en una iglesia desacralizada (con tumba del fundador incluida). El Pleno municipal ha dado luz verde al plan especial que convertirá dos solares religiosos a cinco minutos del Museo del Prado en un hotel de 2.363 metros cuadrados.
Las dos parcelas se ubican entre la calle de San Pedro, 3, y la calle de la Verónica, 11, y pertenecen a la Sociedad San Vicente de Paúl, una organización de católicos laicos de carácter humanitario y benéfico. Entre las instalaciones se encuentra la antigua iglesia de San Roberto Belarmino, en desuso y desacralizada desde 2010. Es decir, que ya no se celebran ritos religiosos en ella.
El proyecto del hotel incluye demoler gran parte de las instalaciones actuales, que según el Ayuntamiento tienen un “escaso valor arquitectónico”. Estas obras se justifican por el distinto estado de conservación de sus diferentes plantas (en buen estado las utilizadas y con deficiencias las que han quedado en desuso) y debido a las numerosas y dudosas ampliaciones y reformas realizadas a lo largo de los años.
Sin embargo, la modificación del uso exclusivo del edificio a terciario de hospedaje ha sido aprobada no sin polémica. La parcela se ubica dentro del ámbito del Bien de Interés Cultural del Conjunto Histórico Recinto de la Villa de Madrid, del ámbito de la cerca y arrabal de Felipe II y en la zona de amortiguamiento del Paisaje de la Luz, declarado Patrimonio Mundial de la Unesco. Por lo tanto, el recinto está sujeto a un nivel de protección elevado. Es por ello que el plan especial aprobado por el Pleno municipal obliga a la promotora de la obra, Coming To Town S.L., a restaurar y mantener la fachada original de la parroquia.
El futuro hotel
Según el diario El Confidencial, la remodelación del hotel tendrá una inversión de cinco millones de euros. El futuro hospedaje tendrá cuatro plantas y espacio suficiente para 65 habitaciones y 112 camas. Además, el proyecto incluye un nuevo sótano que albergará 24 plazas de aparcamiento, una piscina en el patio interior, jardín, solárium, bar-cafetería y varios salones.
Si las obras cumplen los requisitos y plazos establecidos, el hotel tiene previsto abrir sus puertas a finales de 2025. El precio de las habitaciones, según el periódico, rondará los 125 euros la noche.