Harina de trigo, agua, levadura y sal: a un pan se le pueden sumar ingredientes, restar o modificar alguno de los mencionados, pero la idea base para la búsqueda del mejor pan de Madrid parte de estos cuatro elementos fundamentales. Y tan solo alterando las cantidades, los tiempos y la forma de tratarlos se evalúa el resultado final.
Y eso es lo que ha valorado por quinto año Club Matador, que ha juntado a un jurado de expertos y profesionales presidido por el crítico gastronómico José Carlos Capel. El equipo de este año ha determinado que el mejor pan de Madrid es el que se hace en Marea Bread (calle Oña, 125).
En esta ronda final, Marea Bread ha competido con otras panaderías como Alma Nomad Bakery, Clan Obrador, Levain Tahona Artesana, Novo Mundo y Obrador San Francisco. Y el motivo por el que el de Marea es el mejor de las citadas se debe (en palabras del presidente del jurado) a que “tiene un final largo, con gusto a cereales y alguna nota de cerveza y una acidez suave y casi imperceptible”.
Los criterios que se han valorado –cada participante tenía que hacer dos hogazas de un kilo de peso cada una con los ingredientes citados– son el aspecto, la cocción, la miga, el olor y el gusto.
Club Matador busca cada año el mejor pan de Madrid y si el premio del año pasado recayó en Acid Bakehouse, este año el buen trabajo que se premia es el de Miguel Castro, propietario de la panadería ganadora. Castro abrió Marea Bread hace apenas dos años y medio y al respecto del premio ha dicho: “cuando uno abre una panadería y quiere que sea la mejor y esto es algo que solo se consigue con tesón y gracias al compromiso de todos”.