Decía la letra de la famosa canción que «Ahí está, ahí está viendo pasar el tiempo. La puerta de Alcalá». El monumento al que le cantaban Ana Belén y Víctor Manuel lleva viendo pasar el tiempo más de 200 años y para que lo pueda seguir haciendo se anunció el pasado mes de abril que sería restaurado. Ahora, a la vista de los resultados del estudio sobre su estado, se ha concluido que debe ser intervenida de forma inmediata.
Así lo han concluido los estudios que se vienen realizando desde hace meses (y que son la razón por la que la Puerta de Alcalá ha permanecido desde entonces tapada por una lona). Ese trabajo ha sido realizado por un equipo de especialistas en restauración, liderado por la Dirección General de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento, en colaboración con el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE).
En una rueda de prensa este miércoles, el director general de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, Luis Lafuente, ha comunicado que el diagnóstico del monumento es que presenta un importante deterioro que es «mayor en la zona superior del monumento» que los grupos escultóricos tienen problemas estructurales.
Las obras de restauración de la Puerta de Alcalá
Las obras comenzarán a principios de 2023 y tendrán una duración de entre 10 y 12 meses aunque «se tardará lo que sea preciso», ha señalado Lafuente, y tendrán un coste cercano a los tres millones de euros (concretamente 2.613.255,79€). Al respecto la delegada de Cultura del Consistorio madrileño, Andrea Levy, señaló que la Junta de Gobierno municipal planea aprobar hoy «un decreto de emergencia para la tramitación de un contrato que permita empezar los trabajos en un mes».
Por otro lado, el Ayuntamiento no descarta limitar el tráfico alrededor de la Puerta de Alcalá y, quizá, abrirse a la posibilidad de ampliarla y estudiarlo para el ámbito del Paisaje de la Luz. Sin embargo, añade que sería una solución que se podría tomar de manera «parcial» porque «no es realista eliminar el tráfico rodado alrededor de los monumentos de Madrid». Un planteamiento, el de eliminar el tráfico rodado en la Puerta de Alclá, sobre el que escribía Guillermo Hormigo hace unos meses en este artículo de Somos Madrid.