
Son varios los elementos que hermanan a la Comunidad de Madrid con Galicia. Sin ir más lejos, la arquitectura capitalina está profundamente marcada por el trabajo de Antonio Palacios, natural de Porriño, sin el que es difícil imaginar cómo habría sido la ciudad: el templete de Gran Vía, el tótem de la estación de Cuatro Caminos o el emblemático Palacio de Cibeles son solo algunos ejemplos de las huellas que quedan de este arquitecto gallego en Madrid –algunas de las cuales, tristemente, se han borrado–.
Además de en la fisionomía de la ciudad, ambos territorios están unidos, también, por el éxodo de peregrinos, turistas y residentes que cada año se lanzan a recorrer el Camino de Santiago. Y es que hasta cuatro rutas de las que tienen por destino la Catedral de Santiago de Compostela, en la ‘Praza do Obradoiro’, atraviesan la región de Madrid.
Ahora, y coincidiendo en año Xacobeo, la consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, ha presentado en el contexto de la Feria Internacional de Turismo (FITUR) una guía donde se detallan esas cuatro rutas que pasan por la Comunidad de Madrid. Se titula Camino de Santiago en Madrid. Siente el Camino y está disponible tanto en castellano como en inglés.
Camino de Madrid
En esta primera ruta se atraviesan la ciudad y los municipios de la Sierra Norte, lo urbano y lo rural. Tiene su punto de partida en los alrededores del Palacio Real de Madrid, la Real Iglesia Parroquial de Santiago y San Juan Bautista, donde, explica el documento, los que inicien la peregrinación a Santiago de Compostela pueden conseguir su credencial y recibir la Bendición del Peregrino en cualquiera de las misas que se celebran en el templo.
Este camino, dividido en varias etapas, atraviesa puntos como el cruceiro del antiguo barrio de Fuencarral, los senderos del Monte del Pardo o las rutas medioambientales de Tres Cantos, última parada de la primera etapa. La siguiente va de Tres Cantos a Manzanares El Real, que incluye puntos de interés como la Basílica de la Asunción de Nuestra Señora de Colmenar Viejo, declarada Bien de Interés Cultural (BIC), el Castillo de Manzanares El Real y La Pedriza. La tercera etapa transcurre entre Manzanares El Real y Cercedilla, donde se encuentra la fábrica Gabarrera de cervezas artesanales, en Becerril de la Sierra. En Cercedilla, se atraviesa la Caminería histórica del Valle de la Fuenfría, originaria del Imperio romano en Hispania.
Camino Mendocino
Atraviesa más de 40 kilómetros de la Comunidad de Madrid, y recibe su nombre de la familia Mendoza, nobles castellanos a los que pertenecían gran parte de los territorios por los que transcurre este recorrido. Pasa por los municipios de Torremocha de Jarama, Torrelaguna, Redueña, Venturada, Guadalix de la Sierra y Soto del Real.
Entre los puntos de interés que incluye están la Iglesia de San Pedro Apóstol de Torremocha de Jarama y la de Santa María Magdalena de Torrelaguna, declaradas BIC. Por otro lado, en el Puerto deportivo de Guadalix de la Sierra se pueden realizar actividades acuáticas, en el embalse de Pedrezuela. Cabe destacar también el anillo verde de Soto del Real. Una vez superado este punto, este camino conecta con el de Madrid en Manzanares el Real.
Camino de Levante
El camino, procedente de la Comunidad Valenciana y que continúa por la meseta manchega, cuenta con 14 km de recorrido en Madrid. Este camino, que lleva a la Vía de la Plata, conecta con Madrid en San Martín de Valdeiglesias y, de ahí, con Cebreros (Castilla y León).
En este tramo se puede visitar el Castillo de la Coracera –en el que residió Isabel la Católica–, el pantano de San Juan y algunas bodegas enmarcadas en la Denominación de Origen Vinos de Madrid.
Camino del Sureste
Finalmente, el Camino del Sureste –que parte de la provincia de Alicante y lleva tanto a la Vía de la Plata como al Camino Francés–, pasa por la Comunidad de Madrid entre Cenicientos y Cadalso de los Vidrios. En total contiene un trazado de 21 kilómetros, durante el que se pueden observar distintas muestras de patrimonio arqueológico como la Piedra Escrita –que data del siglo II–, restos de una atalaya musulmana o el Palacio de Villena, declarado BIC.