El corte de la línea 2 del metro sigue obstaculizando el transporte madrileño, y moverse por Madrid se ha convertido en una tarea demasiado complicada. La línea 2 ya ha reabierto entre las paradas de Sol y Ópera tras realizarse la reparación pertinente, pero el resto del trayecto (Retiro-Sol) sigue inoperativo y sin próxima fecha de apertura.
Todo comenzó como una incidencia «ajena a Metro» un 25 de enero. Nadie sospechaba que un problema puntual se prolongaría tantos meses. La razón: un destrozo en un túnel de metro derivado de la construcción de un párking privado en el entorno de la plaza de Canalejas. Para acometer la reparación, a finales de abril fue necesario inhabilitar otras dos estaciones de la línea roja (Ópera y Sol), dejando cinco de las paradas más céntricas sin circulación (Ópera, Sol, Sevilla, Banco de España y Retiro). Ahora solo las tres últimas permanecen inoperativas sine die.
Llegar al centro de Madrid se ha convertido en una odisea, puesto que la parada de Gran Vía estará cerrada, al menos, hasta fin de año. Para «minimizar los inconvenientes», en palabras de la Comunidad de Madrid, se habilitó un autobús especial (un mes después de la incidencia) que conecta Príncipe de Vergara con Callao, convertida durante unas semanas en la única parada de metro céntrica a la que se podía entrar y salir.