
Ver a un famoso en un bar siempre tiene algo de cruzarse con un ciervo en mitad de una carretera secundaria: uno lo comenta en voz baja y sigue su camino. Madrid ofrece a menudo ese tipo de encuentros. Famosos que, como mortales que son, también bajan a tomar una caña, un vermú o un pincho de tortilla, como el resto de nosotros.
Uno de esos escenarios es La Ardosa, el bar centenario de Malasaña donde Leiva, el músico que ha vuelto a estar en boca de todos tras su actuación en La Revuelta, pasa a menudo a tomarse algo. Según un artículo de 2016 del blog Esmadrid, entre sus costumbres madrileñas destaca parar «siempre» en este local del 13 de la calle Colón para pedir un pincho de tortilla y un vermú de grifo.
La Ardosa: un lugar centenario
La Ardosa no es un bar cualquiera. Fundada en 1892 por Rafael Fernández en recuerdo de un pueblo toledano, conserva parte de su decoración original: rótulos de cristal grabado, zócalos de azulejos, ventiladores de los de antes. De esas barras en las que uno puede imaginarse a varias generaciones de madrileños (y algún que otro turista) pidiendo exactamente lo mismo: tortilla y vermú.
El pincho, además, tiene su propia fama: cuesta 3,95 € y suele colarse en casi todas las listas que recopilan las mejores tortillas de patata de Madrid. No hay truco (patata, huevo, buena mano) ni tampoco duda: la Ardosa es uno de esos sitios que hay que visitar una vez en la vida.
Leiva y su actuación
Estos días, además, el nombre de Leiva suena más que nunca. El músico ha presentado su nuevo disco, Gigantes, con una actuación especial en La Revuelta, rodeado de un equipo que desde el mismo programa han llamado «los Avengers de la música española»: Dani Martín, Dani Fernández, Iván Ferreiro, Santi Balmes, Eva y Juan de Amaral, Travis Birds y Rubén Pozo.
Más allá de La Ardosa, Leiva también recomendó otros sitios en Madrid, como el Café Madrid, la galería de arte Mad is Mad, el bar Tupperware o la entrañable Casa Federica, que es el único sitio de la lista que ha cerrado, casi un pequeño milagro en una ciudad que cada vez cambia más rápido de piel.
Otros restaurantes que enamoran a famosos
Elegir restaurante es, al final, un impulso tan imprevisible como cualquier otro. Hay quien se guía por el último vídeo viral, quien jura que no hay nada mejor que una buena franquicia, quien solo come donde acaba de abrir algo nuevo y quien sigue el rastro de los famosos. A veces basta con que Aitana cene una noche en un sitio para que ese sitio se llene durante meses. Aquí van algunos de esos locales que antes conquistaron a celebridades como Rosalía.