La gratuidad, reflexionaba Nerea Díaz Ochando en un artículo publicado esta semana en eldiario.es, es una técnica marketiniana de éxito asegurado. Y las instituciones públicas han replicado esa misma lógica. Las visitas guiadas son gratis; las exposiciones, también; los autobuses según que días no cuestan un euro y Bicimad lleva siendo gratis desde marzo.
El Ayuntamiento anunció ayer la prórroga de la gratuidad de Bicimad en el contexto de la ampliación del servicio. Esta ausencia de cobro, que acababa el 31 de julio, se alargará hasta el 31 de diciembre.
La gratuidad de Bicimad tiene pocos matices: es gratis en los trayectos cuyo tiempo no es superior a los 30 minutos. La intención es reducir al máximo los inconvenientes o perjuicios causados a los usuarios como consecuencia del proceso de renovado de Bicimad.
El servicio público de bicicletas está en una fase de renovación que se espera que culmine en septiembre. Para entonces se habrá implementado un total de 7.500 bicicletas nuevas (nuevos modelos, de hecho) y 611 bases.
Los primeros momentos de la implantación del nuevo modelo de bicicleta fueron moderadamente caóticos. Con el paso del tiempo, no obstante, el éxito del programa ha sido notable dado que se han registrado casi un millón de viajes (973.060) y se han superado los 20.000 viajes diarios en 19 ocasiones.