La historia de Madrid, como la del propio mundo, no se entiende sin la presencia del agua. Los canales subterráneos son indisociables de la formación de Madrid. Tanto es así que el lema municipal (“sobre agua fui construida, mis muros de fuego son”) apela en un 50% a la cuestión referida.
Tanto es así, incluso, que la etimología de Madrid apela a eso: “tierra rica en agua”. Eso es lo que significa Mayrit.
Por esa razón, las visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento por las Galerías de agua de Amaniel se pueden considerar, casi, un viaje a los orígenes de la ciudad. La organización dice: «se ha rehabilitado un tramo de este viaje de agua de aproximadamente 50 metros para garantizar su conservación como patrimonio histórico de Madrid y acondicionarlo para realizar visitas de carácter divulgativo».
Y es que los viajes de agua fueron desde 1613 (año en el que Felipe III ordenó su construcción) uno de los motivos que justificaron el crecimiento de Madrid. Las galerías recogían el agua del subsuelo en el norte y a través de canales subterráneos llegaban a la ciudad.
¿La inspiración? Los qanats árabes de los que te hablamos en este artículo.
¿Cómo conseguir entradas para hacer la visita guiada?
El recorrido guiado por esta parte de la historia de la ciudad empieza en la Dehesa de la villa y la inscripción se puede hacer mediante correo electrónico (infodehesa@madrid.es) o telefónicamente (91480214).
En el correo electrónico hay que indicar nombre completo de los participantes, edad y número de teléfono, teniendo en cuenta que cada participante podrá apuntar a un máximo de 2 personas,
Las visitas, por otro lado, duran alrededor de una hora y media, se celebran periódicamente algunos domingos y empiezan a las 10h.