La casquería en general y la oreja en particular, es sabido, no está hecha para todos los paladares. Es gelatinosa, en algunos sitios picante… pero si te gusta tanto como a nosotrxs, hoy te traemos una pequeña ruta por si aún no habías probado alguno de estos sitios.
Aquí tienes los diez mejores sitios de Madrid en los que comer oreja, donde se pueden encontrar desde elaboraciones más tradicionales hasta otras con una vuelta que podrían –quizá– convencer hasta a los más escépticos con este plato.
1. La Nobia
Madrid es diversidad y multiculturalidad, sí, pero también es tradición. Lo moderno y lo castizo van de la mano entre sus más de 3 millones de habitantes, y esta olla de ingredientes se eleva al cuadrado en Lavapiés. Aquí es, precisamente, donde ha (re)nacido La Nobia con una propuesta que es ni más ni menos que eso: Madrid.
Su plato estrella es la oreja y reúne todas las características definidas en este párrafo: oreja crujiente con parmentier y salsa brava. Una preparación diferente e idónea para las personas a las que lo que les echa para atrás de este plato es su habitual textura gelatinosa.
Calle del Salitre, 45 (Lavapiés)
2. Las Bravas
En este clásico de la gastronomía madrileña, donde turistas y locales se confunden, la oreja se sirve bien regada de su espectacular salsa brava. Un aderezo picante que comenzaron a elaborar en los años 50 para añadirle a las patatas y del que, sacan pecho, son pioneros.
Así lo cuentan en su web: «Unos días antes de comenzar la década de los 60 y anticipándonos al éxito arrollador que alcanzaría la salsa, registramos Las Bravas®, la marca que da nombre a una deliciosa receta nacida en el Madrid más castizo y que es imitada en toda España«.
3. La Casa de los Minutejos
Imposible esquivar el chiste: si 60 minutillos equivalen a una horilla, 60 minutejos, indudablemente, equivaldrán a una oreja. Aquí la oreja se sirve en sándwiches de pan de molde. La oreja, al deshacerse su gelatina, forma un bloque con el que luego se hacen estos sándwiches que también se acompañan de salsa picante.
Calle Antonio de Leyva, 19 (Carabanchel)
4. Docamar
Puedes embadurnar la ración de oreja con los botes de salsa que hay repartidos por el local, la misma que usan para sus patatas bravas. Y te recomendamos que, ya que estás allí, además de pedir la oreja no te vayas sin probar las bravas: ir a Docamar y no pedirlas está tipificado en el Código Penal.
Calle de Alcalá, 337 (Ciudad Lineal)
5. Los Gallegos: La Casa del Pulpo
Aunque la fama de este bar de Usera viene precedida por el perfecto manejo del plato que le da nombre al local, en su visita no puedes dejar de probar su ración de oreja. Aquí la sirven tostada a la plancha y con limón o con su salsa picante secreta. Y puedes pedir la ración entera o media para dejar hueco para probar otros platos.
Calle de Almendrales, 17 (Usera)
6. Bar Gonmar
En el Bar Gonmar de Carabanchel saben lo que se hacen, y se hacen una oreja a la plancha a la que le pedirías matrimonio. Además, si quieres, tienes la opción de añadirle salsa brava de acompañamiento (una de esas llenas de misterio y cuyo secreto no te van a revelar).
De hecho, en el momento de escribir este artículo, la última reseña que tiene en TripAdvisor reza lo siguiente sobre este plato: «Oreja magnífica. La mejor oreja de Madrid. Salsa brava espectacular (de la calidad del añorado Yagüe)».
Paseo de Muñoz Grandes, 47 (Carabanchel)
7. Casa Pepe (Pepe ‘El Guarro’)
En el barrio del Pilar y conocidísimo por sus alitas –cuyos restos todo el mundo tira al suelo, de ahí el seudónimo–, está Casa Pepe. Teniendo por lema «Alita a alita, cerveza a cerveza… todos saldremos de esta» sus alitas son, como decimos, de consumo obligado. Pero no tienen nada que envidiar a su oreja.
Calle de Celanova, 19 (Fuencarral-El Pardo)
8. Mesón El Águila
En este restaurante familiar de Vicálvaro, fundado en 1965, el toque final a la oreja se le da con cebollino y se cuenta entre los platos que son especialidad de la casa. Recuerda que estás en un mesón y no olvides echarle un ojo a sus carnes y pescados.
Calle del Lago Como, 2 (Vicálvaro)
9. Casa Braulio
Las hacen al punto que pide el cliente, lo que no suele ser la norma. Se sirve con un majado de ajo y perejil a un lado para que el cliente condimente su ración a su gusto. La Guía Repsol, que le ha dado un Solete, dice de Casa Braulio que es un «típico bar de barrio en La Guindalera con buen servicio, auténtico y decorado como los bares de toda la vida» y recomienda probar también sus famosos boquerones en vinagre.
Avenida de los Toreros, 43 (Salamanca)
10. La oreja de Jaime
Los dueños son gallegos y el lugar es una tasca castiza abigarradamente nacional donde se mezclan los elementos marineros, taurinos, bufandas y camisetas de distintos equipos e incluso utensilios de cocina. Su oreja da nombre al local por un motivo y la sirven bajo el nombre de «oreja especial de la casa»: va acompañada de salsa brava (aunque puedes pedirla sin ella), patatas y pimentón.
Calle de la Cruz, 15 (Centro)