La primera vez que escuché “pop up” pensé en las ventanas de publicidad que te fastidian cuando estás metido en cualquier página web (aaay, chica de pueblo), pero resulta que se trata de un nuevo concepto de tienda efímera (¡viva el moderneo!). Puedes encontrar ropa y complementos originales (para evitar que tú y 100 personas más llevéis la misma camiseta de Inditex) y comprar o comer comida como un auténtico sibarita.
Productos poco conocidos, exclusivos y a precios razonables. Lo que ofrecen los pop ups es algo así como los mandamientos del postureo. La idea se ha vuelto tan famosa que incluso las grandes marcas han querido aprovechar el tirón.
Y cuando hablo de grandes marcas no me refiero al Corte Inglés adelantando la primavera en un puesto ambulante entre Hortaleza y Fuencarral, me refiero a Chanel.
A partir del 5 de mayo y hasta finales de 2015, las más (y los más, ¿por qué no?) it podrán disfrutar (previa cita, por supuesto) de la alta cosmética del nº5 en la calle Claudio Coello, 32.
Pinta muy bien, pero el problema es que no quiero elegir entre comprar un pintalabios ahí o no comer el resto del mes. Así que me he puesto a investigar el mundillo de los pop ups y el que más me ha llamado la atención es el que he encontrado a través de Fever. Es el Unicorn Pop Up market. Se celebra el finde del 16 y 17 de mayo en el 33 de la calle San Vicente Ferrer (Malasaña, como no.
La entrada es gratuita y habrá cervezas artesanas (que ya es una excusa para ir), bikinis, complementos de todo tipo ¡hasta para surferos!, gafas de sol y muchas cosas más…¿Lo mejor? Que ahí podrás comprar más cosas que en el exclusivisimo pop up de Chanel y, probablemente, mucho más barato.
Además, si no te puedes escapar en San Isidro, es un plan perfecto para ahogar las penas.