El verano en Madrid a la totalidad del año es lo que la hora de la siesta a un miércoles normal. La ciudad se para y las administraciones madrileñas encuentran el mes de agosto y parte del de julio como una ocasión pintiparada para poner en marcha todo tipo de obras. Para solucionar desperfectos que se han ido anotando a lo largo del año. Septiembre, sin embargo, es la vuelta a la realidad.
En el caso de Metro, un tramo de la línea 6 cerró durante todo el mes de agosto. El tramo comprende las estaciones de O’Donnell, Manuel Becerra, Diego de León y Avenida de América. Las obras empezaron el sábado 30 de julio y se alargan hasta el sábado 10 de septiembre.
Como consecuencia de las obras, se suspendió el servicio entre las paradas de metro de Sainz de Baranda y Nuevos Ministerios, que sí siguen abiertos para hacer transbordos. A cambio y como suele suceder en estos casos, Metro habilitó un servicio sustitutivo y gratuito de autobuses.
¿En qué consisten las obras?
El principal cometido de esta intervención al tramo de la línea 6 de Metro ha sido el desamiantado de las bóvedas, así como el retirado de los cuartos técnicos. Se han sustituido revestimientos de andenes y accesos por otros materiales actuales.
No obstante, aprovechando que se cierra el tráfico de las estaciones, se implementaron nuevos servicios y distintas mejoras de la estación. Es el caso de la creación de nuevos pasillos de correspondencias, de la ampliación de vestíbulos, de la modernización y mejora de salida de emergencia.
También se ha instalado un mobiliario más moderno y ascensores en una acción que ha requerido una inversión de 70 millones de euros por parte de la Comunidad de Madrid.