El pasado fin de semana Madrid recuperó una escena reversionada (y engrisecida) de años anteriores: el espacio en el que había estado ese lugar comunitario que era la plaza de la Cebada podía volver a pisarse. Ya sin ser una plaza comunitaria y sí (a ojos del Ayuntamiento según declaraciones a eldiario.es) una zona de acceso a un espacio que anhelan los vecinos de la Latina desde hace muchos años: el polideportivo de La Cebada.
La cola para las preinscripciones del polideportivo de La Cebada pic.twitter.com/8luDIy2GH1
— El Sereno de Madrid (Sonia) (@Unsereno) October 10, 2022
El lunes 10 de octubre fue el día que el Ayuntamiento fijó para preinscribirse en un centro deportivo que se inaugurará el 2 de noviembre. La visita presencial es obligada y la lluvia no evitó que se arremolinara la gente en el número 14 de la plaza de La Cebada.
¿Cómo es el polideportivo?
El polideportivo de La Cebada tiene dos piscinas cubiertas, un gimnasio o una pista de atletismo que corona la azotea– con césped artificial y de unas dimensiones de 915 metros cuadrados. En total son 7.720 metros cuadrados repartidos en siete plantas (dos de ellas subterráneas). El polideportivo también tiene espacio de fisioterapia, oficinas para administración, vestuarios y otras estancias.
Antes de que se abra, el centro deportivo ofrece la posibilidad de visitar sus instalaciones, para lo que es necesaria la inscripción en la dirección web.
¿Por qué se inaugura tan tarde?
El proyecto del polideportivo es una aspiración política de la que hay hemeroteca ya en los años de Alberto Garzón. Fue, sin embargo, el Gobierno de Manuela Carmena el encargado de presentar la idea en enero de 2017.
Las obras, por otro lado, terminaron ya bajo la administración del actual alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en enero de 2022. No obstante, la inauguración llegará casi 10 meses después.
El periodista Manuel Viejo informaba el mes pasado en un artículo de El País que se preguntaba por qué había hasta once equipamientos en Madrid cuyas obras estaban terminadas y no inauguradas. La respuesta aparece reflejada en el artículo: porque no se habían llevado a cabo ciertos trámites burocráticos que suelen ejecutarse paralelamente a la construcción.