El avezado ojo madrileño está familiarizado con la convivencia de distintos colores en las líneas que se pintan sobre el asfalto: verde, blanco o azul son los colores más comunes. Pero desde hace poco, a esa gama cromática se le ha incorporado un nuevo color: el naranja.
Su función, ni más ni menos, es la de marcar el camino de los corredores de la Zurich Rock ‘n’ Roll Running Series Madrid, que se correrá el 28 de abril y que se lleva celebrando desde 1978.
Una story de Instagram publicada ayer en la cuenta de Maratón de Madrid a las 12 de la noche mostraba a un vehículo especializado en estas lindes dibujando una línea naranja en una concurrida calle madrileña. Y la publicación iba acompañada del siguiente texto: “aquí está la línea naranja que os llevará a la meta (42k)”.
La 46ª edición de la Maratón de Madrid
Esta edición, la cuadragésimo sexta, es la que más expectación ha generado de todas cuantas se han corrido. Si en la primera edición corrieron 7.500 personas y el año pasado 34.000, para este año se esperan (porque se han inscrito) a 40.000 corredores.
Los corredores, dicho lo cual, han podido elegir entre tres opciones (10 kilómetros, 21 kilómetros o 42 kilómetros). Los dorsales para cualquiera de estas opciones se acabaron dos meses antes de la celebración de la carrera.
¿Qué recorrido trazará?
En cualquiera de las modalidades y distancias, la línea de salida es la plaza de Gregorio Marañón en paseo de la Castellana y la de meta está en el paseo de Recoletos (entre Cibeles y Colón).
Entre medias y dependiendo de la opción escogida, los corredores pasaran por lugares emblemáticos como la Catedral de la Almudena o la Puerta del Sol, la Biblioteca Nacional o el Museo Reina Sofía. También por lugares como el Santiago Bernabéu o las Cuatro Torres Business Area.