Verano y verbena son dos palabras que van de la mano igual que Madrid y chulapa o chulapo. Durante las dos primeras semanas de agosto, Madrid celebra consecutivamente sus tres grandes fiestas (San Cayetano, San Lorenzo y la Paloma) veraniegas.
A lo largo de estas jornadas, que van del 2 al 17 de agosto, hay una oportunidad de exaltar todo el espíritu madrileño sin sentirse juzgado: la parpusa forma parte del dress code, gallinejas es la street food, el twerk hace un huequito al chotis y quien quiera puede comprarse accesorios como este bolso paloma.
Han sido ya casi diez días de celebraciones y el colofón, la Paloma, requiere de una guía práctica para disfrutarla y no fracasar en el intento.
¿Dónde y cuándo es?
La dislexia de las festividades contribuye a no saber diferenciar entre los festivos verbeneros. San Cayetano se ha celebrado del 6 al 9 de agosto, San Lorenzo se celebra del 10 al 13 y la Paloma empieza el miércoles hasta el día 17.
Mientras que el escenario principal de celebración de San Lorenzo es Lavapiés (y concretamente Arturo Barea), La Paloma se celebra en las Vistillas y en la plaza de la Paja. Hay, no obstante, todo un despliegue de medios a lo largo de zonas como la plaza de la Cebada, la de San Francisco o la Puerta de Moros.
El programa de conciertos
No hay mejor reclamo que la gratuidad de un plan y la prueba de ello es ver cómo se saturan las entradas de los conciertos gratuitos en otras fiestas como San Isidro. En La Paloma ha trascendido el concierto de Burning o Kiki Morente, pero hay otros tantos conciertos (como el de Olga María Ramos) verdaderamente interesantes.
Aquí tienes el programa completo, pero te hacemos un resumen de los conciertos más sonados:
- Kiki Morente. Viernes 16 de agosto a las 00h. Jardines de las Vistillas.
- Burning. Sábado 17 de agosto a las 23:30h. Jardines de las Vistillas.
- Amistades Peligrosas. Sábado 17 de agosto a las 22h. Plaza de la Paja.
- Cool Nenas DJ x Mahou. Viernes 16 de agosto a las 00:15h. Plaza de la Paja.
¿Qué cosas típicas tengo que probar?
Las verbenas de agosto son también el momento ideal para probar algunos de los platos y productos típicos de Madrid, y es que el casticismo no solo se respira en la decoración de las calles o en la música popular que anima a bailar a madrileñxs y visitantes de todas las edades: también está (y muy presente) en los puestos de comida que se montan esos días.
Entre ellos, se pueden degustar los entresijos y las gallinejas, platos de casquería cuyo olor inunda estas fiestas (y otras como San Isidro) aunque cada vez queden menos freidurías históricas donde los preparen. A estos platos se suman los típicos calamares, ya sea en forma de ración o de bocata.
Y a la hora de refrescarse pasa lo mismo: no se puede ir a una verbena y no probar la limoná, la bebida por excelencia de las verbenas madrileñas y que podríamos comparar (salvando las distancias) con una sangría. Además, en la mayor parte de ellas los propios vecinos y vecinas preparan limonás populares para todo aquel que se acerque a la fiesta, a cambio de la voluntad.
Consejos prácticos de otra índole
Madrid espera máximas de 37ºC durante algunos momentos de este fin de semana. Las recomendaciones, dado el caso, son las mismas que te daría un familiar: hidrátate y lleva contigo un abanico. Si puedes evitar las horas de mayor calor, evítalas. Durante la noche es cuando más gente hay en la calle.
Otro consejo habitual para los despistados: un mini no es un vaso más pequeño de lo normal, sino más bien todo lo contrario.