Alquilar un kayak en Madrid y redescubrir los pantanos de la Comunidad y alrededores es una forma más que apetecible de dejar por unas horas la capital y su ajetreo para zambullirse en los deportes acuáticos y despejar la mente.
Para hacer rutas en kayak por Madrid se puede proceder de dos maneras: alquilando la embarcación en el embalse en el que vas a hacer el recorrido o llevando tu propio kayak o piragua. En este último caso hay que cumplir los requisitos de navegación de la cuenca hidrográfica a la que pertenezca el pantano. Hay que presentar un documento asegurando que te comprometes a cumplir las normas e informas de que reúnes los requisitos que se exigen.
Pantanos en Madrid para hacer kayak
1. Embalse del Atazar
El embalse del Atazar es el más grande de la Comunidad de Madrid. Se encuentra en la sierra Norte, a una hora de la capital. También es conocido por su enorme tamaño como ‘el mar de Madrid’. Forma parte del Canal de Isabel II y está rodeado por la denominada Mancomunidad del Embalse del Atazar, en la que se encuentran pueblos tan distinguidos como El Berrueco.
Al ser un pantano tan grande hay que tener en cuenta el viento; es muy complicado atravesarlo si lo llevas en contra. Lo mejor es dosificar los trayectos y hacer descansos. Desde el agua se puede atravesar por debajo el puente del Canal de El Villar y avistar las paredes colonizadas por las aves rapaces. Todo un lujo.
📍 A 76 kilómetros del centro de Madrid
2. Embalse de Picadas
📍 A 60 kilómetros del centro de Madrid
3. Pantano de San Juan
A solo 50 km de la capital está el pantano de San Juan, un clásico de los veranos madrileños y de los deportes acuáticos. Tiene dos zonas de recreo principales: la playa Virgen de la Nueva, que tiene bandera azul, y El Muro.
Una de las ventajas principales de recorrerlo en kayak es que se puede llegar a las pequeñas calas que de otra manera no son tan accesibles, y son perfectas para descansar los brazos del remo, darse un baño y comer alejados del gentío.
📍 A 71 kilómetros del centro de Madrid
4. Embalse de Valmayor
El embalse de Valmayor está situado en un enclave privilegiado. Se encuentra al noroeste de la Comunidad de Madrid, dentro del Parque Regional del Curso Medio del Guadarrama, abarcando los términos de: Valdemorillo, Galapagar, Colmenarejo y El Escorial.
Una ruta fácil en kayak para ver el pantano es recorrerlo de ida cerca de una orilla hasta el muro de la presa de los Arroyos. Y la vuelta es aconsejable realizarla por el otro margen, porque en este tipo de embalses hay que tener en cuenta las rachas de viento que nos pueden complicar la excursión al llevarlas en contra.
📍 A 40 kilómetros del centro de Madrid
5. Ruta en kayak por el Tajo en Aranjuez
Dejando los pantanos a un lado, damos un paseo por el Tajo. Aranjuez tiene palacios y jardines que visitar por doquier, pero, además, uno de los ríos más importantes de la península. El Club Escuela de piragüismo Aranjuez, ofrece rutas con y sin monitor con las que disfrutar del verdor que río deja a su paso por la vega del Tajo, y ver los jardines del Príncipe y la Casa del Labrador como si fuéramos en una falúa real, pero algo menos lujosa.
📍 A 49 kilómetros de Madrid
6. Embalse de Puentes Viejas de Buitrago del Lozoya
Buitrago de Lozoya ha sido declarado como el tercer pueblo más bonito de España, pero además de una visita a este pueblo medieval, también puedes rodearlo en una ruta en kayak.
Se puede hacer un recorrido circular, fácil, que comienza y termina en el pueblo y pasa por el puente del castillo. Hay un embarcadero con un aparcamiento preparado para este tipo de excursiones.
📍A 81 kilómetros de Madrid
Rutas en kayak a 100 km de Madrid
7. Embalse de Bolarque
El embalse de Bolarque —en Guadalajara— es una de las playas de interior cerca de Madrid más apetecibles. Aunque tiene una importante diferencia con respecto al resto: es de pago. Cuesta 10 € cualquier día de la semana.
Hay chiringuito y existe la posibilidad de alquilar kayaks con los que darse una vuelta por la zona y visitar espacios como la cueva de las tortugas. Un plan de fin de semana redondo a 100 kilómetros de Madrid.
📍 Guadalajara. A 130 kilómetros del centro de Madrid.
8. Embalse de Entrepeñas
El embalse de Entrepeñas, junto con los embalses de Buendía, Bolarque, Zorita, Almoguera y Estremera, forma lo que se llama el Mar de Castilla. Tiene tres zonas de baño muy conocidas desde los años 70, cuando se pusieron de moda: Alocén, Durón y Pareja.
Este embalse ha sido muy castigado por los trasvases de agua, pero vuelve a estar casi como en los niveles de agua originales. Es especialmente agradable su recorrido en piragua gracias al paisaje que brinda la Alcarria. En la cola del embalse, el Tajo llega formando varios meandros, y se pueden formar rápidos, algunos más fáciles que otros de remontar.
📍 Guadalajara. A 116 kilómetros del centro de Madrid.
9. Pantano del Buendía
Entre las provincias de Cuenca y Guadalajara se encuentra el embalse de Buendía. Se pueden hacer rutas sencillas en kayak y, además, según el nivel del agua, se descubren las ruinas del balneario y hospital de La Isabela, construido a finales del siglo XIX. Fue inundado por las aguas cuando se construyó la presa en 1955.
También se forman algunas islas en medio del embalse, que son una parada perfecta para pequeñas embarcaciones, muy tranquilas y de aguas cristalinas. Para rematar la excursión es interesante la visita a la ruta de las caras, que se encuentran en una península del pantano.
📍 Guadalajara. A 150 kilómetros del centro de Madrid.
10. Hoces del Duratón
Las Hoces del Río Duratón plantean una buena alternativa al calor porque es posible hacer el recorrido en piragua. Hay distintas empresas que organizan estas rutas —con las que es imprescindible reservar previamente— y el precio suele rondar los 30 € por tres horas.
Hay diferentes rutas, pero el recorrido más común suele empezar en la localidad segoviana de San Miguel de Bernuy, y de ahí se adentra en las Hoces. En este espectacular paisaje, de paredes de tierra colorada socavadas durante siglos por el agua, se pueden ver los nidos del buitre leonado.
📍 Sepúlveda. A 140 kilómetros del centro de Madrid.