No hay fecha mala. Ningún mes en el año es mala opción para huir a unos kilómetros de la capital y conocer los pueblos más bonitos de Madrid. En invierno, la excusa es ver la nieve; y en verano, huir del calor. En ambos casos es una oportunidad más que maravillosa para hacer una escapada de fin de semana y aprovechar para comer en uno de los muchos (y buenos) restaurantes que hay en la Sierra. La región tiene pueblos preciosos en los que desconectar del estrés, así que te proponemos algunas escapadas cerca de Madrid.
1. Buitrago de Lozoya
Buitrago de Lozoya es un pueblo medieval al más puro estilo Señor de los Anillos. Está rodeado por una muralla y los atardeceres desde su castillo son preciosos para un plan romántico. Y si os gustan los misterios, se rumorea que hay una casa encantada. El Ayuntamiento de Buitrago del Lozoya, además, tiene también un museo que recoge las obras que Pablo Picasso le regaló a su peluquero. Un pueblo cerca de Madrid perfecto para una excursión en kayak o en bici por los alrededores.
2. Chinchón
Anís, plaza y mesón. Su refrán le viene como anillo al dedo. Al pasear por su plaza mayor la boca se te hace agua con todos los lugares que encuentras para comer o para comprar pelotas de fraile o tetas de novicia. Chinchón es tan espectacular que ni siquiera se ha escapado de los ojos de Wes Anderson, que rodó en este icónico pueblo la película Asteroid City.
3. Manzanares el real
Manzanares el Real tiene una de las grandes joyas arquitectónicas de la Comunidad de Madrid: el Castillo Nuevo de los Mendoza. Fue construido en 1475. Recibe su nombre por haber sido la residencia de los Mendoza, una de las familias más poderosas durante los siglos XV y XVI. La guía Lonely Planet lo incluye como uno de los más espectaculares de España. De su interior destaca la galería gótica que se encuentra en el primer piso y, en el exterior, en excelente estado de conservación, sus cuatro torres, las almenas, los matacanes y las saeteras, que ofrecen unas impresionantes vistas.
Esta villa de la cuenca alta del Manzanares también cuida su privilegiado entorno natural. Es la puerta de entrada a la Pedriza, que es parte de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera y uno de los grandes enclaves para senderistas en Madrid.
4. Rascafría
Rascafría es un destino ideal por sus rutas de senderismo. El agua de nombre del pueblo se entiende cuando entras en contacto con sus aguas, pero el recorrido es idóneo para desconectar del bullicio de la capital y disfrutar del paisaje, por lo que cualquier época del año es buena para visitarla.
5. Puebla de la Sierra
El camino hasta Puebla de la Sierra ya te prepara para la paz y el descanso que se vive en él (aunque no es apto para los que se marean durante los viajes). Puede que te quedes sin cobertura, pero es un lugar ideal para hacer turismo rural y empaparse del verde del paisaje. Apenas tiene setenta habitantes y pasear sus calles bien podría entenderse como una antítesis de Madrid.
6. Roblelacasa
Aunque Roblelacasa pertenece a Guadalajara no está muy lejos de otros pueblos del norte de la región como La Hiruela. De sus casas parece que van a salir hobbits en cualquier momento. No hay ni bares, ni tiendas, por lo que hay que irse preparado para hacer alguna de sus espectaculares rutas, que desembocan en la cascada del Aljibe, con pozas incluidas en las que darse un baño si el tiempo lo permite.
7. Patones de arriba
La arquitectura negra y el envidiable enclave convierten a Patones de Arriba en uno de los pueblos más espectaculares de toda la región madrileña. Este pueblo de la Sierra Norte de Madrid fue durante muchos años un sitio en el que por no pasar no pasaba ni el tiempo. La situación cambió cuando fue declarado Bien de Interés Cultural y automáticamente se reveló en lo que ya era: el pueblo más bonito de Madrid.
8. Cercedilla
Cercedilla es otro de esos pueblos en los que parece no pasar el tiempo. Su estación de tren es un claro ejemplo. Hay un montón de rutas muy fáciles de hacer, por lo que tras probar sus carnes no hay excusa para no elegir alguna de ellas. ¿Lo mejor? Que se puede llegar en cercanías con la línea C-8. Es uno de esos pueblos cerca de Madrid perfectos para hacer una escapada.
9. El Escorial
Aunque parezca una de las paradas más obvias, redescubrir el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial merece siempre el viaje: de admirar una de las bibliotecas más bonitas de Madrid uno nunca se cansa. También es una buena oportunidad para descubrir el pueblo de El Escorial, que tiene algunas joyas del siglo XVIII, como el Real Coliseo de Carlos III y el café del mismo teatro. Como si estuvieras dentro una película: una escapada romántica perfecta.
10. Talamanca del Jarama
Talamanca del Jarama guarda alguna de las joyas de la arquitectura románica más importantes de la Comunidad de Madrid. Sin duda este es uno de los pueblos más bonitos y cercanos a la capital de la conocida como Campiña del Henares, en el límite con Castilla-La Mancha.
Entre sus cinco monumentos declarados como bien de interés cultural destacan el ábside románico de la iglesia parroquial de San Juan Bautista y el puente romano sobre el arroyo del Caz.
11. Horcajuelo de la Sierra
Horcajuelo es un pueblo pequeño de la Sierra del Rincón —junto con el siguiente, la Hiruela— está rodeado por el Hayedo de Montejo. Es uno de los hayedos más meridionales de toda Europa y desde 2017 Patrimonio Natural de la Humanidad por parte de la UNESCO. Debido a la singularidad del bosque las vistas al propio hayedo están limitadas y son siempre gratuitas y guiadas por parte de Educadores Ambientales.
Un 50% de los pases de visita se puede conseguir a través de reserva previa online. El otro 50% se guardan para adquirirlos de manera presencial, se entregan por orden de llegada el propio día de la visita y se pueden adquirir hasta que se agoten en el Centro de Información de la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón (calle Real 64, Montejo de la Sierra).
12. La Hiruela
Anclada en plena Sierra del Rincón y catalogada como Reserva de la Biosfera de la Unesco, La Hiruela cuenta con el encanto propio de los pueblos de piedra de la Sierra. Su paisaje de casas marrón oscuro, a base de piedra y madera, son la antítesis de los muros encalados del sur: perfectas para visitar en una escapada en pareja.
La Reserva de la Biosfera Sierra del Rincón está formada por un territorio montañoso situado entre los macizos de Ayllón y Somosierra. Todo un pulmón verde que incluye los pueblos de La Hiruela, Horcajuelo de la Sierra, Montejo de la Sierra, Prádena del Rincón, La Puebla de la Sierra y, ahora, Madarcos.
13. El Berrueco
En Madrid no puedes tener una casa con vistas al mar, pero sí a un embalse y El Berrueco es uno de esos pueblos de la Comunidad de Madrid donde hacer este cliché realidad. A orillas del Atazar se encuentra este pueblo rodeado de peñascos y piedras berroqueñas, de donde toma su nombre. Además de pasear por el pueblo y conocer la Atalaya de Torrepedrera o la Iglesia de Santo Tomás Apóstol, y por supuesto, disfrutar de los alrededores que son una prolongación de la sierra de la Cabrera, aquí hay que visitar el Museo del Agua, aprovechando la presa del embalse.
14. Navalcarnero
A menos de una hora de la ciudad, hay un destino muy castellano donde disfrutar de un buen vino. Navalcarnero pertenece a la Denominación de Origen de Vinos de Madrid y no es de extrañar que esté rodeado de viñedos y bodegas.
Entre la curiosa historia de este pueblo de calles empedradas con fachadas de colores destaca la boda de Felipe IV con su sobrina, la archiduquesa Mariana de Austria.