Con estos planes la lluvia en Madrid no te parecerá un problema para vivir la ciudad. Aunque no faltan adeptos a las precipitaciones, especialmente en las zonas donde menos llueve, siempre preferimos verla desde la ventana, oírla de fondo. Pero quedarte en casa no es la única manera de disfrutarla, es hora de coger el paraguas, las botas de agua y el chubasquero, porque, aunque el día esté nublado, en Madrid no será nada gris.
1. Es tiempo de teatro
Siempre es buena excusa para repasar la cartelera de teatro en Madrid y descubrir que la oferta es tan grande como para encontrar algo a tu gusto. En el Teatro Clásico Nacional la programación es perfecta para sentar las bases y redescubrir el porqué de su fama y el encanto del teatro. Si prefieres novedades y puestas en escena más arriesgadas están los Teatros del Canal. Para espectáculos, obras más distendidas y musicales, además de la Gran Vía, están el Teatro Maravillas, el Lara, el Rialto, y si quieres un poco de todo en el Teatro Reina Victoria será mejor opción.
2. Ir al museo
Da igual cuántas veces hayas ido al Museo del Prado, al Reina Sofía o al Thyssen: nunca son suficientes. Además, puedes visitarlos gratis en ciertos horarios y días de la semana. Otras opciones, quizás menos conocidas, pero también interesantes, son la colección privada del Museo Cerralbo, el Museo Sorolla, que era vivienda y taller del pintor valenciano, o el Museo Lázaro Galdiano, también colección privada con auténticos tesoros de platería europea, joyas y obras de arte de pintores tan ilustres como el Greco.
3. Visitar los Mercados de Madrid
En la nueva vida de los mercados, ahora convertidos en espacios gastronómicos y culturales de la ciudad, son una opción perfecta para solventar planes con lluvia en Madrid. Muchos de ellos tienen un lavado de cara reciente digno de conocer, como el Mercado de San Antón o el de la Cebada, con una propuesta de ocio muy apetecible. Otros continúan prácticamente intactos y con ese equilibrio entre mercado de barrio en el que hacer la compra y tomar algo no están reñidos, como es el de Tirso de Molina. O también el de Antón Martín, que a nuestros ojos es una de las nuevas mecas gastronómicas de la capital.
4. Descubrir los nuevos cafés de especialidad
El café está de moda. Hasta hace unos diez años era difícil encontrar café que no fuera torrefacto y ahora es cada vez más fácil dar con café de especialidad en Madrid. Esta versión natural, seleccionada desde la semilla, que suele servirse en cafeterías de estética minimalista, traída de países nórdicos, ha invadido la mayoría de las urbes y la nuestra no iba a ser menos, un buen ejemplo son: Syra Coffee, Casa Neutrale y Golda, entre otros. Es de agradecer que casi siempre se acompañe con algún dulce casero o de obrador propio, donde incluso pueden vender pan de masa madre, como ocurre en Acid Backehouse. Dos en uno.
5. Visitar el Monasterio de las Descalzas Reales
Este tesoro de Madrid, el Monasterio de las Descalzas Reales, está algo oculto para el gran público y, sin embargo, se encuentra tan solo a 5 minutos de la Puerta del Sol. Es un edificio repleto de objetos y obras de un valor incalculable y no solo porque antes de convertirse en monasterio fuese un palacio, sino porque en él ingresaban mujeres pertenecientes a la nobleza y al hacerlo sus familias hacían donaciones increíbles a la entidad. Se convirtió en monasterio por deseo de la hija del Rey Carlos I, Juana de Austria. En él hallarás más de 10.000 obras de arte, entre las que se encuentran pinturas de Zurbarán y Tiziano. Es preferible sacar la entrada con antelación porque las visitas son limitadas.
6. De libro en libro
Ediciones difíciles de encontrar, libros al peso, coloquios literarios, ciclos de cine y libreros encantados con su oficio. No se trata de ir a una librería al uso, si no a las librerías más originales de Madrid. Tienen poco que ver con las grandes empresas de venta de libros, la dedicación y selección de quién te atiende habla de cada una de ellas y las hace únicas. En muchas de ellas puedes sentarte y tomar algo mientras disfrutas de las aventuras que hay entre sus páginas.
7. Más que cines
Un clásico, lo sabemos, pero es buena ocasión para revisar la programación de las salas de cine alternativas de Madrid, empezando por la principal, el Cine Doré. Y siguiendo por tomar algo y ver lo que echen en la Sala Equis, aprovechar la Cineteca de Matadero para descubrir películas de no ficción y no podemos pasar por alto la selección del Cine de Círculo de Bellas Artes perfecta para los más clásicos.
8. Centros comerciales
Una opción apta para todos los públicos son los centros comerciales. No solamente son un lugar de ocio y compras, cada vez cuentan con más actividades, deportes y experiencias que les diferencias y especializan en áreas. Si lo que buscas son deportes como la escalada –o el surf, para días más soleados– X-Madrid es el sitio; si prefieres conocer marcas nicho de moda y belleza en plena Gran Vía está WOW Concept y si te apetece pasear a cubierto cerca de un lago por el centro comercial más grande Madrid, en Oasiz consiguen aunar ambas.
9. Una sesión de Spa
Un plan que aúne belleza y relajación (bajo un techo cubierto) puede solucionar hasta los días más grises. En el capital puedes elegir entre recorridos completos de balneario como el Hammam Al Ándalus , construido sobre las ruinas de unas termas romanas en plena calle Atocha; o darte un capricho en el spa más grande de la ciudad, 1400 metros de hedonismo con vistas a la plaza Canalejas, un lujo al cuadrado.
10. Lecturas madrileñas
Si a pesar de todo esto no sientes FOMO (siglas en inglés para describir miedo de perderte algo), puedes imaginar que estás recorriendo las calles de la ciudad a través de los libros. De Galdós a Santiago Lorenzo, Madrid ha inspirado muchas obras de los escritores más variados y desde los puntos de vista más imprevisibles. Esta ciudad tiene mucha literatura y nunca es tarde para empezar a descubrirla.
La lluvia ya no es una excusa, son muchas las opciones como para no elegir algún plan a cubierto en Madrid en el que olvidarte del (mal) tiempo.